Para aquellos que les resuena un “light my fire” del mítico grupo The Doors están fuera de tema. Esta vez las canciones eran improvisadas alrededor de una inmensa llamarada por residentes, los cuales exigen mayor iluminación en un predio que se inunda en tinieblas ante el cruce reiterado de muchos estudiantes.
Tal es así que hace pocos días una joven fue interceptada por un hombre que la manoseó. La fiscalía le informó a la denunciante que 5 casos habían sido expuestos con anterioridad. De allí comenzaron a surgir otras denuncias de estudiantes que decidieron contar experiencias similares.
La Secretaría de Extensión y Asuntos Estudiantiles ya fue notificada, al igual que la comisaría ubicada en el barrio 250 Viviendas. Por ahora los residentes expresan que no se ha hecho nada.
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